Perder a mis últimas mamás...

Toda mi vida me fue muy fácil ser amiga de mujeres mayores que yo...
Cuando mi madre pasó de este mundo al Paraíso, puede decirse que "heredé a sus mejores amigas"... Y, pasaron a ser mis nuevas mamás...
Acabo de enterarme que Dios decidió llevarse para "sus pagos" a las dos últimas que me quedaban en esta tierra...
Elsa, como duele pasar por la esquina y saber que no te voy a cruzar cuidando tu jardin o barriendo tu vereda.
Tía Ofelia, ya no voy a probar tus tortas fritas y tus churros...
¡Mami, llegaron las dos que faltaban! Preparen el mate y pasenla lindo, entre charlas, tejido y costura... Hagan mucho lío alla arriba...
Acá las vamos a extrañar, pero las vamos a tener más cerca que nunca...